domingo, 14 de enero de 2024

PLAZA DE LAS FLORES

La recién remodelada y hermosa Plaza de las Flores, se ubica en el centro neurálgico de la localidad, donde en su entorno, se levantó la primera choza para el culto a Dios en 1757, y posteriormente, en su parte más a levante, con acceso de entrada por poniente, una barraca que con los años, en 1776 se convirtió en el primer templo de material de Isla Cristina y Parroquia independiente de La Redondela desde 1823.

El entorno de esta plaza, con el nombre primitivo de Plaza de la Iglesia,  ha visto a lo largo de su historia el devenir de la vida cotidiana de la localidad, cambiando su fisonomía en diferentes épocas, sobre todo, a partir de 1936 con el derribo de la primitiva Iglesia de Ntra. Sra. de los Dolores,  que propició el ensanche,  casi como la hemos conocido hasta nuestros días.

A la espalda de la iglesia en la zona norte, se ubicaba el precioso edificio del antiguo ayuntamiento, derribado en 1969,  conservándose algunos edificios de una gran belleza como son el antiguo Casino “La Unión”, la reconstruida Casa “de Gildita” y la popular “Casa de Don Justo” entre otros.

A lo largo de la historia, esta céntrica y hermosa plaza ha tenido diferentes nombres oficiales: Plaza de la Iglesia,  popularmente conocida en la época como  Plaza Vieja, rotulada a finales del siglo XIX como Plaza de la Constitución, en 1942 como Plaza del Caudillo Franco y el actual de Plaza de las Flores desde 1995, aunque mucho antes de que fuera rotulada oficialmente, de manera popular era también conocida como  “El Paseo de las Flores”.

Son seis las calles que confluyen con la Plaza de las Flores: Calle Catalanes, Calle Diego Pérez Pascual, Calle Armada Española, Calle del Carmen, Avda. Gran Vía de Román Pérez y Conde de Vallellano.  























sábado, 13 de enero de 2024

CALLE CONDE DE VALLELLANO (EN SU TRAMO DEL CASCO ANTIGUO O HISTÓRICO).

Me permito la licencia para hablar de este tramo concreto y  diferenciarlo,  del resto de la calle, que lo haremos en otra ocasión.

Antigua Calle del Conde, desconocemos el origen de su nombre, ni a qué Conde se refiere, pero este singular tramo, hoy convertido en una zona muy transitada por el ocio, con diferentes bares y  restaurantes, llegaba desde la Plaza de la Constitución, hoy de las Flores, hasta la calle San Juan, hoy Serafín Romeu Portas.  

Fue en antaño un tramo muy diferente a lo que conocemos, con  viviendas donde habitaban familias acomodadas y que con el relleno del estero de Santa Catalina y la ampliación y construcción de nuevas viviendas hacia el sur en la década de los años 50 del siglo pasado, la calle se amplió y prolongó, cambiando su nombre en 1957,  cuando el pleno del ayuntamiento a instancias de su alcalde D. Juan Mirabent Gutiérrez le añadió el titulo de Vallellano, rotulándose desde entonces como Conde de Vallellano en honor del benefactor para Isla Cristina y Ministro de Obras Públicas D. Fernando Suárez de Tangil, quien visitó Isla Cristina el 21 de abril de 1956.

Gracias a la gestión de este señor, se realizaron diferentes obras de ensanche en la zona portuaria norte, Muelle de La Marina, mejoras con el dragado de la barra, que eran demandas históricas por la población así como la construcción de la “Lonja de Agadir” destinada a la pesca de sardinas.

Este tramo al que nos referimos, comprende desde la Plaza de las Flores, y cruza la calle Serafín Romeu Portas hasta la calle Baja.

La calle Conde de Vallellano, continúa hasta la Calle Miramar y ya la ampliaremos en otro momento, y destacamos este tramo, porque es el que corresponde al Casco Antiguo o Histórico de Isla Cristina.  











viernes, 12 de enero de 2024

CALLE DEL RECUERDO

Su nombre es tan hermoso como su entorno, ya que en ella se encuentran dos de los edificios más señeros e importantes de Isla Cristina que la embellecen, el antiguo y centenario  Casino “La Unión” y la reconstruida “Casa de Gildita”.

La antigua Calle del Recuerdo, nacía en la plaza de la Iglesia y finalizaba en el puerto pesquero, hasta que en 1929 cambió su nombre por el de Matías Cabot Alfonso. 

El pequeño tramo, de lo es actualmente la Plaza de las Flores, antes del Caudillo Franco,  hasta Matías Cabot, fue rotulado tras la Guerra Civil con el nombre de Calvo Sotelo, en memoria de José Calvo Sotelo, un político perteneciente a la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA), que en la madrugada del día 12 al 13 de julio de 1936, fue asesinado en una camioneta de la Guardia de Asalto, y su muerte provocó la sublevación militar y la Guerra Civil española (1936-1939). Calvo Sotelo,  había sido declarado por el bando nacional,  como el primer mártir de la cruzada contra los "enemigos de la patria".

En 1994, fue retirado  el nombre de Calvo Sotelo por el actual de Calle del Recuerdo y primitivo,  el que siempre tuvo toda la calle y que en esta ocasión,  se ciñe al tramo que va desde la Plaza de las Flores hasta la Calle del Prado en su límite con Matías Cabot Alfonso.

Es un ramal que en antaño, tuvo un gran transito para ir desde el sur y el este de la localidad al mercado de abastos así como a la zona norte del puerto.

Al tener una situación de norte a sur, como anécdota,  cuando sopla el terreño (viento de norte) genera una gran corriente al no tener obstáculos y una gran sombra por la altura de sus edificios, por ello, gran parte de la población la llamó popularmente como “La Calle del Coño” ya que la expresión más oída al volver para adentrarse en ella era: ¡coño, que frio!





jueves, 11 de enero de 2024

CALLE MATÍAS CABOT ALFONSO

Es una calle agradable y acogedora que comunica el puerto pesquero, Muelle de La Marina,  con el centro neurálgico de la localidad, y finaliza en la Calle Del Prado, adentrándose en la Calle del Recuerdo, que desemboca en la Plaza de las Flores.  

Se aprecia dos partes bien definidas,  una la más cercana al puerto con algunas naves industriales y otra, mayoritaria residencial, con hermosas viviendas de un cierto empaque arquitectónico.

El nombre primitivo de esta calle fue “Calle del Recuerdo”  ya rotulada en 1824 y es en 1929, cuando se produce el cambio de nombre siendo alcalde Braulio Flores Obiol,  ya que la familia Cabot Alfonso,  había residido durante muchos años en esta calle,  aunque durante algunas generaciones, se le siguió llamando del Recuerdo hasta la adaptación generacional y nuestros días.

Su nombre está dedicado al isleño Matías Cabot Alfonso, que nació en 1880,  Abogado de profesión y  Licenciado en Filosofía y Letras, Asesor de Marina y Juez Municipal desde 1910 a 1918.

Perteneció a una familia de industriales y salazoneros con la firma “Cabot Alfonso” y que dirigían sus hermanos José y Emiliano, junto a  Matías,  que se encargó de la asesoría jurídica hasta su fallecimiento en 1918 cuando contaba la edad de 37 años.



















miércoles, 10 de enero de 2024

CALLE JUAN MARTÍN CABET

 Es un pequeño callejón que comunica las calles Carreras con Matías Cabot.

Curiosamente está conformada por los laterales de las viviendas de las calles antes citadas, que hacen esquina y tienen acceso por puertas de servicio o “falsas”.

Su nombre está dedicado al industrial y armador isleño Juan Martín Cabet, que nació en enero de 1841 y falleció el 4 de noviembre de 1934.

Hacia 1888, tras un viaje de negocios a Boston en los Estados Unidos de América,  donde había recogido información sobre las modernas artes de pesca de la época, introduce en la flota pesquera andaluza la tarrafa, un arte de cerco que aplicaría a su propia flota y con el que conseguiría grandes éxitos en las capturas.

Pionero de la industria pesquera en Andalucía, fue promotor en 1892 de la primera fábrica conservera de Isla Cristina.

En la década de 1910, cuando se modernizó la flota, fue una vez más Martín Cabet quien introdujo la iluminación eléctrica en uno de sus nuevos barcos.

Por sus aportaciones al sector pesquero recibió la Medalla del Trabajo. Sus últimos años los pasó igualmente en Isla Cristina, donde falleció el 4 de noviembre de 1934.

En la Plaza de la Constitución, hoy Plaza de las Flores, donde se ubica el Restaurante La Sal, la Asociación de Estudios Históricos, El Laúd, en 2002, donde estuvo  su casa natal, dedicó y colocó una placa recordatorio en su memoria.