El 23 de diciembre de 1939 en la
víspera de la Noche Buena, el galeón “Purita Pérez” con base en Isla Cristina,
navegaba hacia poniente capeando un gran vendaval, mientras buscaba la barra de
Ayamonte para arribar a puerto ante la imposibilidad de hacerlo en Isla
Cristina por la peligrosidad de su barra.
Los barcos ayamontinos, mejor
conocedores de la zona fueron los primeros en entrar y enfilar la barra para
hacer su entrada. Detrás de ellos, el Purita Pérez intentó hacer lo mismo
mientras luchaba contra las inclemencias, pero la mala suerte y el destino, les
hizo embarrancar en los bajos de San Bruno justo en la desembocadura del río
Guadiana a las 19:30 h. de la tarde de aquel 23 de diciembre, pereciendo casi
la totalidad de su tripulación compuesta por 52 hombres, de los que perecieron
46 de los 50 que embarcaban en aquel momento. Solo hubo 4 supervivientes.
En 2015, durante el Pregón que
ofrecí por el 75 Aniversario de la llegada de la nueva imagen de Ntro. Padre
Jesús del Gran Poder a Isla Cristina, dediqué un pasaje a la tragedia que dio
origen a la llegada de su efigie.
Cuando en el día de hoy se cumple 80 años de aquel naufragio, sirvan aquellas palabras como reconocimiento vivo a sus
memorias. D.E.P