La celebración de la Semana Santa en Isla Cristina, a pesar
de no contar con unos hondos orígenes históricos, con el paso de los años se ha
convertido en un evento profundamente
arraigado en la tradición religiosa y cultural de los isleños.
Su imaginería religiosa es de una calidad excepcional,
evidenciando la destreza y el talento de los artistas que han contribuido a lo
largo de un siglo a la creación de estas obras de arte sacro, con pasos,
cuidadosamente elaborados, la mayoría de ellos actualmente en un proceso de
restauración o transformación y que transmiten la intensidad de la Pasión de
Cristo a través de detalles minuciosos y expresiones que conmueven a los fieles
y visitantes por igual.
Conocemos por las memorias del primer sacerdote el Padre José
Mirabent, que el primer “templo” para el culto a Dios que se levantó en la Real
Isla de La Higuerita fue en 1757. Desde aquella choza en la antigua colonia de
pescadores, se ha manifestado siempre una gran devoción mariana hacía la Stma.
Virgen María en sus diferentes advocaciones, primero en la Virgen de los
Dolores, y muy poco después en las veneradas
imágenes de la Stma. Virgen del Rosario y del Carmen.
En 1799, el propio sacerdote nos indica que se realizó el
altar del sagrario y se colocó la imagen de un crucificado del que desconocemos
su título o advocación y que fue en 1850 cuando se bendice la Capilla del
primer Cementerio isleño con el nombre de “Santísimo
Cristo de la Resurrección y la Vida”.
Durante más de un siglo y medio, concretamente 164 años,
aquella pequeña choza, después parroquia, celebró para los fieles la Cuaresma y
la Semana Santa con sus Cultos y Oficios como debieron ser correspondientes:
Triduo Pascual y la conmemoración litúrgica de la Pasión, Muerte y Resurrección
del Señor.
No es hasta adentrado en el siglo XX, cuando tras la donación
por la familia Pérez Romeu en 1921 del Grupo Escolar Ntra. Sra. de los Ángeles con
capilla propia dedicada a Jesús Nazareno,
y la donación de una imagen de tamaño natural con la advocación de Jesús del Gran Poder,
obra del escultor D. José Alsina Subirá, se propicia en la Archidiócesis de
Sevilla la fundación y erección canónica de la primera cofradía de nazarenos de
Isla Cristina, no obstante, existen datos de que en esa misma década, los años 20, y bajo palio, la
primitiva imagen de la Virgen de los Dolores de Juan de Astorga, salía en
procesión y se encontraba con Padre Jesús, para continuar su recorrido hasta la parroquia. Esto se produjo
hasta la llegada en 1929 de la primitiva imagen de la Virgen de las Mercedes de
D. Antonio Castillo Lastrucci, cotitular de Padre Jesús. Se desconoce, desde cuándo procesionaba la Virgen de los
Dolores, ya que anteriormente lo hacía
el Viernes Santo acompañando a la imagen de Cristo Crucificado de la parroquia,
y que organizaba Don Ventura Mirabent
Milá.
A lo largo del pasado siglo XX, se fueron creando y fundando
la mayoría de las diferentes Hermandades
y Cofradías isleñas que han ido ocupando un gran espacio en nuestra Semana
Mayor, consiguiendo altas cotas de calidad artística y devocional hasta nuestros
días.
En 1922 se funda la primitiva y centenaria Hermandad del
Santo Entierro de Ntro. Señor Jesucristo y
que se reorganizó tras la Guerra Civil en 1942.
En los años difíciles de posguerra se fundan tres nuevas
corporaciones. En 1943 un grupo de excombatientes en el frente de guerra, en
acción de gracia, deciden crear la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Cautivo y la
Virgen de la Paz, y es en 1946 cuando el gran cofrade D. Manuel Carrasco
Fragoso (Manolito el de los Santos) hace realidad que desde la Capilla del
Grupo Escolar Ntra. Sra. de los Ángeles,
procesione por primera vez el Señor
Atado a la Columna para visitar la zona de “Allá Arriba o el Mundo Nuevo”.
El 7 de abril de 1949 un grupo de amigos y devotos crean la
Hermandad de Jesús en su Entrada
Triunfal, conocida popularmente como del “Señor de La Mulita” y en 1956, los
jóvenes de Acción Católica fundan la Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena
Muerte.
El 15 de abril de 1960 por una acción de gracia motivada por la
recuperación de un ciudadano en un accidente, un grupo de 33 amigos deciden
fundar la Hermandad del Santísimo Cristo de la Vida, (titulo de la imagen y que
esta pudo recibir recogiendo la devoción quizás, de aquel primitivo Señor
crucificado que había dado nombre al primitivo cementerio) que ya procesionaba,
y a quien el escultor José Sanjuán
Navarro en 1940 había adaptado la cabeza primitiva a un nuevo cuerpo, para
posteriormente, designar como cotitular a la Virgen de los Dolores que también
procesionaba y que había sido rehecha también por el escultor Sebastián Santos
Rojas en 1937, tras los sucesos de julio
de 1936.
Es el 28 de marzo de 1975, cuando a instancias del párroco de
la Parroquia de los Dolores, Don Manuel
Martin Gil, Don Manuel Carrasco, “Manolito el de los Santos” funda la Hermandad de la Virgen de la
Soledad, adaptando un hermoso busto de una virgen anónima del siglo XVIII de la
escuela granadina, que había donado el Doctor Don Carlos Granado León, y que durante años estuvo en una hornacina en
la sacristía.
Fueron muchos los años huérfanos de un Lunes Santo sin
procesiones, que dejaban un gran vacío. No fue hasta este siglo XXI, y en la
Semana Santa de 2017, cuando por primera vez la Pro-Hermandad del Stmo. Cristo
de la Humildad, presidida por D. Javier
Castro Medero, sale a la calle con una magnifica imagen del escultor isleño D. Francisco
José Zamudio Barroso, complementándose años después con la dulce belleza de una imagen cotitular de la
Virgen con el titulo de Esperanza, también
del mismo autor.
Hace muy pocos meses, el 26 de noviembre de 2023, a
instancias del párroco Don Héctor Hugo
Vásquez Márquez y una comisión parroquial al efecto, fue bendecido en la
Parroquia de Ntro. Padre Jesús del Gran Poder la imagen de un hermoso Cristo
Resucitado de tamaño natural, y que Dios
mediante, recorrerá las calles de Isla Cristina en procesión en la Semana Santa
de 2024.
En rincones concretos de Isla Cristina, se puede apreciar el
legado de un siglo de procesiones que han dejado una huella imborrable en la
comunidad, donde las calles se convierten en un escenario donde la fe, el
recogimiento, la tradición y el arte se entrelazan de manera sublime. La Semana
Santa de Isla Cristina no solo es una manifestación religiosa, va más allá, también
es una expresión artística que ha perdurado a lo largo del tiempo. Las
procesiones, los pasos y la imaginería religiosa son testimonios vivos de la
devoción de la comunidad, creando una experiencia única que trasciende lo
terrenal para conectar con lo divino.
La Resurrección, celebrada por los cristianos con gran júbilo
el Domingo de Resurrección, cerrará una semana con la esperanza y la alegría de
la victoria sobre la muerte, marcando el renacimiento espiritual y simbolizando
la promesa de vida eterna y que en La Redondela, desde tiempos
inmemoriales ya se venía celebrando con la “Procesión del Huerto” o “Del Niño
Perdido”.
Con esta nueva imagen de la Resurrección, obra del imaginero sevillano Jesús Cepeda se cierra
y da sentido a esta catequesis plástica que se produce en nuestras calles y que
viene a completar la iconografía que nos faltaba de la Pasión, Muerte y
Resurrección de Ntro. Señor Jesucristo en Isla Cristina, casi un siglo después
de la fundación de la primera Cofradía isleña, y dando más sentido que nunca a
aquel titulo que el Ilustre Padre José Mirabent, puso a la Capilla del primer Cementerio y que
en mi opinión, podría ser reutilizado como título oficial para denominar a nuestro Señor
Resucitado: “Santísimo Cristo de la Resurrección y la Vida”