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martes, 16 de abril de 2024

Un Himno para la Virgen del Rocío

 Artículo publicado en el periódico La Higuerita 15-4-2024




Dice un  cierto e incuestionable refrán: “que quién guarda, halla”. 

Hace años que guardo en una carpeta, algunas publicaciones, recortes de prensa que me parecían interesantes, recordatorios y un largo etc., y que en alguna que otra ocasión,  cada vez que se hacía una limpieza en casa,  he tenido que oír la frase de: “A ver si despejas esto de una vez, que ya no sabes dónde meter tantos papeles que no sirven para nada y solo hacen coger sitio” y que estuvieron a punto de ir a parar al contenedor de la basura, lo que hubiera sido un pecado imperdonable por mi parte. 

Entre esas cosas que he guardado,  está el texto del himno a la Virgen del Rocío con letra de Doña Antonia Martín Tortosa y que la Hermandad del Rocío, publicó en 1977, impreso en la imprenta de Miguel Vázquez y con la música del sacerdote Don Manuel Martín Gil.

Inmersos en la celebración del Cincuentenario de la Fundación de la Real e Ilustre Hermandad de Ntra. Sra. del Rocío de Isla Cristina, creo que estos documentos merecen ser conocidos por todos y por qué no, volver a ser oído públicamente en alguna de las misas que se celebran a lo largo de todo el año, recuperándose como un pequeño patrimonio inmaterial, al margen de su calidad.  

Esta pieza musical compuesta por Don Manuel Martin Gil, se estrenó en la primavera de 1976, hace ahora 48 años, durante los cultos preparatorios para la Romería de Pentecostés de aquel mismo año, y fue interpretada por el Coro de las “Hijas de María” de la parroquia,  que dirigía por entonces por Antoñita Martín Tortosa, gran poetisa mística y profesora de música, que cambió el rol en esta ocasión y escribió una preciosa letra,  para que don Manuel, el cura párroco de la Iglesia de Ntra. Sra. de los Dolores, que era un gran organista,  compusiera la música.

Esta pieza, que fue recuperada y que pudimos oír a propuesta de este que suscribe, en el 25 Aniversario Fundacional y durante los cultos preparatorios de 1999, fue interpretada nuevamente por aquel mismo grupo,  aunque ya muy mayores,   las “Hijas de María” que la interpretaron por primera vez, dirigidas por Antoñita Martin.  Desde entonces, guardo una fotocopia de la partitura, y de la que no he querido desprenderme.



Esta pieza musical, no es una composición a la usanza rociera, sino un canto a la Virgen lleno de espiritualidad, música litúrgica concebida para ser tocada en interpretada en el contexto litúrgico y religioso, que bien se podría intentar recuperar, interpretándose y fuera  grabada para que  no se perdiera, ahí nos queda el reto…….

A lo largo de los años, y es una realidad que se repite más de lo que debiera,  muchas corporaciones, entidades, asociaciones y hermandades, se han desprendido de gran parte de su historia que ha acabando en la basura, borrándose y desapareciendo parte de la vida de las mismas. Enseres, ajuar, programas de cultos, actas y documentos que debieron estar bien custodiados y archivados, se han perdido para siempre por problemas de espacio, desconocimiento de su valor, traslados, cambios de sedes, limpiezas o por cualquier otra razón, o porque se depositaron en casas privadas de dirigentes pensando que era el mejor lugar para ello y nunca se devolvieron, y en otras circunstancias, no dieron importancia y no supieron custodiar ese legado, o “lo hicieron suyo”, sin entender, que toda esa documentación es patrimonio de todos y que no se puede guardar en casas privadas, salvo copias o las excepcionalidades y siempre bajo un documento firmado, porque son la única fuente fidedigna para la memoria y poder perpetuar la historia de las mismas, el estudio y la  investigación. El único lugar donde debe estar toda documentación son las sedes, bien archivada y custodiada, además,  con un inventario y que las juntas y directivas salientes, deben dar cuentas de ello en régimen interno a las entrantes en un traspaso de poderes.

En mis publicaciones, nunca opino, ya que la historia no tiene opinión, sino que se cuenta y escribe según los hechos, nos gusten más o menos, siempre desde la objetividad, las pruebas,  y los datos recabados y contrastados. 

Ya lo escribió Antonio Machado: “La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad aunque se piense al revés”.  Ahí queda,  mi aviso para navegantes….